Tras cerrar la llave de paso seca la zona del escape y envuélvela con varias capas de cinta aislante.
Después consigue un trozo de manguera unos cinco centímetros más larga que el tramo dañado y hazle una abertura longitudinal.
Envuelve la tubería con la manguera y átala con alambre en los extremos.
Cuando esté bien sujeta rodéala varias veces con cinta aislante.
Después consigue un trozo de manguera unos cinco centímetros más larga que el tramo dañado y hazle una abertura longitudinal.
Envuelve la tubería con la manguera y átala con alambre en los extremos.
Cuando esté bien sujeta rodéala varias veces con cinta aislante.